El Servei Català de Trànsit instalará en los próximos dos meses 30 nuevos radares fijos. EL PERIÓDICO revela hoy en su edición impresa la ubicación de estos cinemómetros, que mayoritariamente están ubicados fuera del área metropolitana de Barcelona. Con estos se alcanzarán las 217 ubicaciones de control de velocidad estáticas, aunque una de cada cinco cajas estará vacía.
El director de Trànsit, Joan Aregio, ha asegurado que el objetivo es reducir el volumen de accidentes. En los próximos tres años, la Conselleria de Interior se ha propuesto bajar la siniestralidad en un 15%, una cifra considerable teniendo en cuenta que en la última década el descenso ya ha sido importante. Una de las quejas de Aregio es que durante los últimos nueve años (el primer cinemómetro se instaló en la autovía de Castelldefels en 2002) no se ha vigilado si estos dispositivos habían sido efectivos o no.
590 expedientes en Vielha
Además de los radares fijos que funcionan con microondas, Catalunya también cuenta con 19 radares piezoeléctricos (que funcionan con tres bandas en el suelo que activan la cámara superior cuando se supera el límite marcado) y con uno de tramo. Se trata del de Vielha, que se instaló a finales del 2008, pero que no comenzó a sancionar hasta agosto del año pasado. Desde entonces se han abierto 590 expedientes sancionadores.
Precisamente, otra de las novedades del control de velocidad será colocar nuevos controles de tramo en 15 carreteras catalanas, que no deben ser expresamente zonas de túnel. También se está valorando cómo funcionan los dos ecológicos que pusieron en febrero en L'Arboç (Baix Penedès) y Biosca (Segarra), que se activan con energía eólico-solar y no necesitan toma eléctrica.
El Periodico edición impresa del 5 de mayo de 2011.
En un 38 % de los casos que los usuarios reclamaron la cobertura de sus pólizas de seguro del hogar en 2011 fue por daños causados por agua, según un estudio.
